La carne es maciza, frágil, blanca, inodora y sabor algo amargo.
Fructifica en otoño, aunque pueden verse ejemplares en primavera y verano, bajo pinos y otros árboles. Común en toda la Sierra de Guadarrama.
Comestible de joven, después de hervido y tirando el agua de cocción.
Volver a Ecología